Tesla ha anunciado eso tan importante que nos iba a contar esta semana. Creíamos que nos sorprenderían con la llegada de un nuevo modelo, pero estábamos totalmente equivocados. La firma estadounidense ha ido un paso más allá y nos ha dejado con la boca abierta al afirmar que todos sus coches serán autónomos a partir de 2018.
Elon Musk ha dicho que su sistema de conducción autónoma vendrá de serie en toda la gama, incluido el Model 3, que será sin lugar a dudas el modelo más barato que venderán durante los próximos años.
El piloto automático definitivo
De esta forma quieren acabar con la polémica generada por culpa de su piloto automático, que como seguramente ya sabrás está en el punto de mira por determinados accidentes en los que sería bueno saber si el conductor obró correctamente o no.
Como es lógico, el desarrollo de la conducción autónoma les ha llevado un tiempo. Han invertido mucho dinero para terminar un radar frontal, ocho cámaras con un alcance de 250 metros a la redonda y quince nuevos sensores ultrasonidos que por lo visto son más potentes que los que están utilizando ahora mismo.
Con todo eso, y con un sistema informático que debería funcionar a las mil maravillas para evitar disgustos (Musk habla de «superordenador en el coche«), Tesla cree que ha llegado el momento de dar el paso definitivo, el que algunas marcas fechan como pronto en algún momento de 2020. Eso sí, tendrá un sobreprecio de 7.500 euros.
A finales del año que viene demostrarán al mundo que están preparados para prescindir del conductor. Lo harán tanto en Los Ángeles como en Nueva York, dos ciudades en las que venden muchas unidades. Hasta que ese día llegue, continuarán trabajando en nuevas actualizaciones del piloto automático como la que estará disponible en diciembre. Gracias a ella incorporarán nuevas funcionalidades como las que te permiten abandonar una autopista o llevar a cabo un adelantamiento sin tocar el volante.
Serán los primeros, pero no tardarán en tener competencia
No hay que olvidar que hay otros fabricantes que están trabajando en la misma dirección. Ford, BMW y Mercedes-Benz consideran que sus primeros coches autónomos están a unos 5 años de ver la luz, mientras que otras empresas como Uber o Alphabet (matriz de Google) no se cansan de realizar pruebas con el objetivo de perfeccionar sus propuestas.