Se ha repetido la historia. Marco Wittman se ha proclamado campeón del DTM como ya lo logró en 2014, y una vez más lo ha hecho conduciendo un BMW M4. Por eso los bávaros han recurrido a la misma fórmula, a la de lanzar una edición especial para celebrar un título muy importante de cara a la imagen de la compañía.
Tan exclusivo como potente
Como las 23 unidades que vendieron de la pasada edición limitada se esfumaron en un abrir y cerrar de ojos, esta vez han optado por un total de 200 unidades que son bastante más radicales que las de dos años atrás.
Estamos hablando de un BMW M4 DTM Champion Edition que monta un motor ya conocido, puesto que es el mismo que encontramos bajo el capó del BMW M4 GTS. Me refiero al de 3.0 litros y seis cilindros en línea que entrega 500 CV de potencia y 600 Nm de par máximo para que sus prestaciones sean de otra galaxia. Acelera de 0 a 100 km/h en 3,8 segundos y puede alcanzar los 305 km/h de velocidad punta.
Detalles que se valoran
Este M4 tan especial viene con la carrocería teñida en blanco Alpine e incluye una serie de modificaciones estéticas que no solo le permiten ser más llamativo, sino que también mejoran su estabilidad. A saber: alerón trasero, carcasas de los retrovisores y faldón delantero de fibra de carbono, taloneras laterales específicas… Todo ello aderezado con unas llantas de aleación de 20 pulgadas de las que no es difícil enamorarse.
La fila de asientos trasera se ha evaporado y el interior es tan deportivo que parece estar preparado para competir en el DTM. Los asientos son M Carbon de piel y Alcantara, hay arneses para soportar los envites de una vuelta rápida en circuito y hasta una jaula antivuelco por lo que pueda pasar.
Precio prohibitivo
Como es lógico, este BMW M4 DTM Champion Edition no descansará en el garaje de cualquiera. En Alemania costará 148.500 euros, algo menos de lo que cuesta el M4 GTS, que en España se vende desde 166.900 euros.