Se está hablando mucho del Volkswagen Golf GTI Clubsport S en los últimos días. La firma alemana ha lanzado dicha versión especial para celebrar el 40 aniversario del Golf GTI y se la va a llevar al festival monomarca de Wörthersee, donde también estará el Golf Clubsport a secas que presentaron el año pasado.
Este último compacto deportivo, cuya potencia es de 265 CV, contará con una versión tuneada por Oxigin Wheels que no dejará indiferente a nadie. Habrá quienes la alabarán y habrá quienes la detestarán. Cuestión de gustos que te parezca más o menos acertada su atrevida interpretación.
No apto para conservadores
Los preparadores alemanes, acostumbrados a trabajar con modelos del Grupo VAG, han tirado de imaginación para añadir algo más que sal y pimienta al Golf GTI Clubsport. A nivel estético salta a la vista que está listo para la guerra. Nos lo dicen los vinilos con diseño de garra que recorren su carrocería por los laterales, pero también las grandes llantas de 19 pulgadas con detalles en rojo que han sacado de su almacén.
El tema de las suspensiones se lo han tomado muy en serio. De entrada es un coche que va muy pegado al asfalto, lo que refuerza su deportividad y lo pone en aprietos a la hora de afrontar un badén. Por suerte es un problema que se puede solucionar recurriendo a su suspensión delantera ajustable, que incrementa la altura libre al suelo cuando es necesario.
Para terminar, hay que hablar de una modificación que afecta positivamente a su rendimiento. Como se puede apreciar en las imágenes, este Golf GTI Clubsport tuneado por Oxigin Wheels ha doblado el número de tubos de escape para pasar de dos a cuatro. Esto es así porque se han decantado por un sistema de escape deportivo de la marca Remus y un bajante personalizado de 200 celdas firmado por Bull-X.
Fotos del Golf GTI Clubsport de Oxigin Wheels
me gustan esos coche