Las Navidades pasadas estábamos escribiendo sobre este asunto; este año sobre las mismas fechas la rumorología pone a circular de nuevo comentes sobre el posible Ford Fiesta RS.
El departamento de Ford Performance ni afirma ni niega, tal como estábamos doce meses atrás. El modelo Fiesta 2008 está el mitad de su línea de vida, sano y saludable, y estrenó el ST 182 CV en el 2013. Tomando el pulso de lo que acostumbran a durar las generaciones de modelos inamovibles de un catálogo, podemos conjeturar que aún seguirá hasta el 2017. De ser cierta la llegada de un RS, sería justo antes del traspaso de poderes del actual Fiesta al próximo.
Motorización similar a la del Focus ST
Las especulaciones británicas y alemanas mencionan el 2.0 EcoBoost afinado en torno a los 225 CV, cuestión que lo dejaría demasiado próximo al Focus ST por una diferencia de precio un tanto escasa. Esto lo haría un modelo accesorio, sin demasiadas ventas en un mercado como el español, pero funcionaría como demostración de poder.
Precio contenido si nos fijamos en la competencia
Un Fiesta RS dejaría de lado competidores como el Clio Sport o el Peugeot 208 GTi, a los que ya les ha ganado la mano en unidades despachadas. Más bien apuntaría a un Nissan Juke Nismo (218 CV), un Mini John Cooper Works (289 CV), un Audi S1 (231 CV), o un Opel Corsa OPC (207 CV). Ford estaría en disposición de ofrecer una ingeniería con fuerzas parejas a un precio ligeramente más bajo.
En cualquier caso, siempre serían algo más de 30.000 €, y dentro de los coches seminuevos y de ocasión, por esa cifra hay vehículos que de largo son más útiles y tienen musculatura sobrada. El mismo Ford Focus ST, tanto en cinco puertas como en cuerpo de familiar, sería un ejemplo válido.
Un Fiesta RS sí sería apetecible para pequeños equipos privados involucrados en competiciones de turismos sin tracción total en circuitos europeos.
¿Se hará realidad?
Posible dentro de un plano mecánico y viable para las fábricas, sí que lo es. El 2.0 EcoBoost se muestra como un motor de múltiples caras, acogiendo bien reformas que lo ponen en una horquilla entre 200 y 300 CV sin apariencia de fragilidad; está funcionando bien en el Fiesta del Campeonato Mundial de Rally. Al último, nos plantamos en un final de año exacto al anterior; la chismografía persiste, y crecen los dibujos y las fotos generadas con ordenadores semana a semana. Nuestras fotos, por ahora, son las del Fiesta WRC.