Sabíamos que con un Lamborghini era más fácil ligar. En octubre de 2013 te mostré un vídeo de una broma en la que se puso en evidencia que con un superdeportivo todo puede cambiar a la hora de invitar a una chica a comer. Las cazafortunas están preparadas para subirse a un coche de lujo, de la misma forma que unos chicos pueden cambiar de opinión de golpe y porrazo cuando ven que alguien a quien no conocen de nada conduce un Lamborghini Huracán.
¿Por qué no ser amigos?
Es lo que sucedió en las calles de Beverly Hills, en California. Por allí no es extraño ver coches de alta gama, pero un Lamborghini siempre llama la atención. Sobre todo si eres un turista inglés que está algo aburrido junto a su amigo y no tienes planes importantes en las próximas horas. Es en ese momento cuando cualquier petición te parece atractiva si ello implica subirse al nuevo superdeportivo salido de Sant’Agata Bolognese.
El protagonista de esta broma con cámara oculta ha podido comprobar que sacar un Lamborghini a pasear es más efectivo que sacar una caja de Donettes a la hora de hacer amigos. Hay mucho gold digger suelto…