Audi quiere mantener el título obtenido en Le Mans el año pasado. No quiere que Porsche se lo arrebate de la noche a la mañana. Por eso acaban de presentar un R18 e-tron quattro optimizado preparado para dar guerra en el Campeonato Mundial de Resistencia (WEC).
Las principales mejoras tienen que ver con su carrocería, que ahora es más aerodinámica que nunca. Las entradas de aire situadas en los pasos de rueda delanteros son más grandes, los faros se benefician de la tecnología LED ‘Audi Laserlight’ y también son de nueva factura tanto el alerón delantero como el capó.
Pruebas y más pruebas
Los ingenieros de la compañía de Ingolstadt han trabajado en dos configuraciones distintas para adaptarse a las exigencias de cada uno de los circuitos del calendario. El chasis está preparado para afrontar cualquier situación que se plantee, algo para lo que también han contado con la colaboración de Michelin, que es la firma encargada de suministrar los neumáticos que monta esta criatura.
No menos importante ha sido la duplicación de los megajulios por vuelta en Le Mans, que pasan de dos a cuatro, mientras que la frenada regenerativa se encarga de enviar la energía de vuelta al eje delantero. Su motor eléctrico entrega 272 CV y ahora es capaz de almacenar 700 kilojulios de energía, un 17% más que en 2014.
El otro propulsor es un V6 TDI de 4.0 litros y 558 CV, del que tan solo se podrán utilizar cinco unidades a lo largo de toda la temporada. Serán los encargados de mover esta máquina que solo pesa 870 kilos.
