El término «hipster» tiene su origen en los años 40, con el florecimiento y éxito del jazz. La sociedad más joven afroamericana de aquellos tiempos impulsó una subcultura que hoy sigue latente, aunque su terminología evolucionó hasta formar un colectivo “alternativo” y lejos de la moda instaurada. Hoy, los hipsters coinciden en un estilo de vida donde predominan las grandes gafas de pasta, barba poblada y guitarras para cantar en inglés y sólo en inglés. Pero, ¿qué vehículos clásicos están pensados para ser el coche de un hipster? Veamos algunos ejemplos.
Jeep Grand Wagoneer (años 80)
Jeep lanzó este modelo hace más de 30 años (1984), aunque hoy define plenamente al hombre «lumbersexual» que invade cada vez más las calles, es decir, una evolución»montañesca» del hipster común. Se trata de un coche adelantado a su época, con un diseño idóneo para los ‘macho alfa’ de hoy que visten camisas a cuadros, llevan barba frondosa, pantalones tejanos y presumen de una hombría sobrenatural. El famoso vaquero de Marlboro también estaría encantado con este modelo 4×4 de lujo cuya primera generación llegó en los años 60 para sustituir al Jeep Willis Station Wagon.
Pontiac Phoenix (1980 – 1984)
Existe un antes y un después con la salida en 1980 de la segunda generación del modelo Phoenix de Pontiac. La primera versión nacida en el 77 inspiraba elegancia, originalidad, juventud y radicalidad a partes iguales, pero finalmente no llegó a su quintaesencia y perdió fuelle por el camino. A pesar de esto fue un excelente coche y hoy su personalidad pegaría perfectamente con ese hipster que pasó por transiciones de moderno, bohemio, indie o finalmente, “gafapasta”. Al igual que sucedió con el modelo Phoenix, los hipsters desarrollaron en los últimos años un interés más selectivo por la naturaleza y adoptando una estética más austera. Como dato importante, se trata de uno de los primeros coches en traer de serie elevalunas y asientos eléctricos, aire acondicionado e incluso techo solar. Si tienes ojo de halcón, quizás lo hayas reconocido en películas como ‘Las colinas tienen ojos’ de 2006 o en ‘Watchmen’.
Ford F-100 (1967-1972)
La quinta generación del famoso F-100 de la compañía Ford fue construida sobre la misma plataforma que su antecesor, aunque mejoró en algunos aspectos: líneas de estilo más definidas, un interior más amplio y más opciones de motorización. El modelo sufrió múltiples cambios durante su fabricación, aunque la estética seguía siendo la misma debido a su gran popularidad. Hoy es una de las camionetas clásicas americanas más codiciadas por los hipsters.
Plymouth Valiant (1963-1966)
La segunda generación del Plymouth Valiant redujo las pretensiones futuristas de su antecesor perfilando sutilmente aquellas líneas de su carrocería. El hipsterfandom siempre se ha sentido atraído por todas las generaciones de este peculiar modelo de Chrysler, pero el ‘Barracuda’ además de un motor con nada menos que 180 CV de potencia, destacó como una alternativa más económica a modelos como Ford Fairlane o el Chevrolet Malibu, por poner un ejemplo.
Volkswagen Thing (Safari)
Los hipsters se jactan de ser únicos y muy diferentes a todas esas tribus urbanas que se ven definidas y evidenciadas por su forma de vestir y la música que escuchan. Les encanta el estilo vintage, ya sea en ropa y complementos como a efectos personales. Para ellos está el Volkswagen Thing, un coche retro con estilo chic, inconformista, ‘hippie’ y con aires de safari (como se le llamó en España y México) que renuncia a las comodidades actuales. Este automóvil de culto nacido en 1969 fue inspirado en el coche de mensajería alemán ‘Kübelwagen’, con detalles tan sofisticados como el parabrisas abatible (al igual que los asientos traseros) y puertas desmontables a mano. Quizás lo reconozcas por ser el coche de Patty y Selma en Los Simpsons.
BMW Neue Klasse (1962-1977)
Los expertos en moda coinciden en un aspecto claro: el hipster jamás se reconoce como tal. Esto también sucede con el BMW ‘Nueva clase’ que a pesar de ser el modelo que aseguró la solvencia de BMW después de su crisis financiera de los años 50, no se le acredita ningún honor. Pero así fue, y al igual que un hipster evolucionó su moda hasta nuestros tiempos, el BMW Neue Klasse estableció su identidad como un auténtico sedán deportivo.
Si tienes espíritu de hipster y quieres subir el peldaño de la originalidad, ¿Por qué no comprar un coche sin puertas a los lados? Alucina con estos ejemplos.