Quienes se pasen por el Salón del Automóvil de Los Ángeles tendrán la oportunidad de acercarse a escasos metros del Audi más rápido de la historia, que como no podía ser de otra forma es un derivado del R8.
Se llama Audi R8 Competition y se fabricará en unidades limitadas. Solo 60 privilegiados podrán tener una en casa. Solo 60 personas podrán decir que conducen el Audi más veloz que se ha fabricado jamás.
Deliciosamente potente
Su corazón es el mismo que palpita bajo el capó del Audi R8 V10 Plus. Es un V10 de 5.2 litros que no entrega 550 CV como en la versión convencional. Se va hasta los 578 CV para mejorar sus espectaculares prestaciones. Puede acelerar de 0 a 100 km/h en 3,2 segundos y alcanzar los 320 km/h.
¿El último de una generación histórica?
La irrupción de esta máquina tan imponente puede ser un aviso para navegantes. Del Audi R8 se han vendido 54.600 ejemplares desde que se empezó a fabricar en 2007. Primero teníamos el coupé, pero después llegaron el V12 TDI Le Mans, el Targa o Roadster, el Spyder y el GT. Con tanta versión y con tantos años dando vueltas por más de medio mundo, tengo la sensación de que muy pronto viviremos el nacimiento de un nuevo superdeportivo que nos dejará a todos boquiabiertos.
Scott Keogh, presidente de Audi América, ha reconocido que el R8 Competition es el modelo que más se acerca al R8 LMS Ultra de competición. Es ligero por el empleo de soluciones aerodinámicas de fibra de carbono, potente gracias a su motor de 570 CV, e inevitablemente atractivo por detalles como el nuevo sistema de escape o sus llantas de aleación de color negro brillante. Es, en definitiva, un coche mejor que el R8 que conocemos, la guinda de un pastel que pronto será sustituido por otro más dulce que todos querremos probar, pero que muy pocos podrán encargar.
