El Mercedes-Benz Clase S Coupé ya tiene su propia versión AMG. Ha sido bautizada como S 65 AMG Coupé y visto lo visto promete mucho, ya que bajo su capó se aloja un motor V12 biturbo de 6.0 litros que le permite circular sobrado de potencia, además de una serie de mejoras mecánicas y tecnológicas que hacen que su conducción sea un placer al alcance de muy pocos bolsillos.
Estéticamente también ha cambiado para mostrar una imagen más radical. Lo notamos en las nuevas llantas de 20 pulgadas, en los detalles cromados, en el splitter frontal dividido en tres bloques, en la parrilla de doble filo con el logo de la marca o en las salidas de escape.
Motor V12 biturbo de 630 CV
Si tuviéramos que definir a este S 65 AMG Coupé, lo haríamos empezando por su generoso motor, eso está claro. Entrega 630 CV y 1.000 Nm de par máximo entre las 2.300 y las 4.300 rpm, así que sus prestaciones son cuanto menos respetables. Pasa de 0 a 100 km/h en 4,1 segundos y alcanza una velocidad máxima de 250 km/h limitada electrónicamente, porque si no fuera así podría rondar los 300 km/h sin problemas.
La eficiencia no es una palabra que se puede relacionar con su motor. Consume una media de 11,9 l/100 km y emite 279 g/km, una burrada para lo que estamos acostumbrados hoy en día. La caja de cambios es una AMG Speedshift Plus 7G-Tronic de siete marchas que se adapta a tres modos de conducción para mover el eje trasero: Efficiency, Sport y Manual.
Cambios más allá del propulsor
Las soluciones tecnológicas le ayudan a mejorar su dinamismo y facilitan la conducción. La suspensión deportiva AMG dispone de función de balanceo en curvas y se activa entre los 15 y los 180 km/h. Gracias a ella es capaz de inclinar la carrocería, así que los pasajeros ni se enteran cuando se está en plena curva. El confort se mantiene inalterado.
Otra novedad interesante que tiene que ver con la suspensión es Road Surface Scan. Se trata de una cámara situada en el parabrisas que es capaz de adaptar la suspensión en función del estado de la carretera, puesto que es capaz de escanear los metros que se están a punto de recorrer. Todo ello con una dirección deportiva de asistencia variable que junto a la suspensión modifica su comportamiento en función del modo elegido, que puede ser Comfort o Sport.
El equipo de frenos también está preparado para soportar las acometidas del S 65 AMG Coupé. Dispone de pinzas de color gris, aunque de forma opcional puedes optar por unas de color rojo con las que es imposible pasar desapercibido. Además, siempre estás a tiempo de decantarte por los frenos cerámicos opcionales, que son 20 kilos más ligeros que los de serie y resisten temperaturas más elevadas.
Un interior soñado
El interior es como se podía esperar: lujoso y deportivo a más no poder. Hay distintivos AMG tanto en los asientos como en la consola central para que sepas que no estás en un Mercedes-Benz cualquiera y el cuero se apodera de varias partes de habitáculo, como por ejemplo los asideros del techo.
Los asientos son deportivos, de cuero de nappa y con un acabado delicioso. Dicen que son perfectos para afrontar viajes largos, y tengo que decir que no me cabe la menor duda sin haberlos probado. Te puedes decantar por varias combinaciones: marrón/negro, gris/negro, porcelana/marrón café o negro a secas.
El cuadro de instrumentos es como el del Mercedes-Benz Clase S Coupé. Dispone de dos pantallas TFT con una resolución de 12,2 pulgadas. El volante tiene un diseño de tres radios y no le faltan levas para jugar con el cambio de marchas.
Equipamiento de serie y precio en Alemania
De equipamiento anda bastante sobrado. De serie tienes el Touchpad, el Head-up display, cámara de 360 grados, equipo de sonido Burmester High End 3D, asistente de aparcamiento Parktronic, asistente de ángulo muerto Distronic Plus, asistente de mantenimiento en el carril, entrada y arranque sin llaves, freno Pre-Safe…
Su precio de venta en Alemania es sencillamente prohibitivo. Se venderá a partir de 244.009 euros con el 19% de impuestos incluido. Aquí en España, como siempre, tendremos que pagar unos cuantos miles de euros más.