Los fans del diésel que tienen planeado comprarse un Audi Q5 tienen un motivo más para decidirse (o para estar indecisos). El gigante alemán ha decidido incorporar un nuevo motor a la gama, el 2.0 TDI de 190 CV, que está disponible con transmisión automática S tronic de 7 velocidades y tracción integral quattro.
Con esos datos se sitúa entre el 2.0 TDI de 177 CV y el V6 3.0 TDI de 245 CV. Cumple con la normativa de emisiones Euro 6 y lo mejor de todo, aparte de los 149 g/km de CO2 que emite, es que solo consume una media de 5,7 l/100 km, algo que le permite mejorar lo ofertado por el 2.0 TDI de 177 CV, que consume 5,9 l/100 km en el mejor de los casos y tiene todas las papeletas para desaparecer en un futuro no muy lejano.
Prestaciones
Las tiene porque los datos de prestaciones también varían a favor del nuevo propulsor, que acelera de 0 a 100 km/h en 8,4 segundos y puede alcanzar una velocidad máxima de 210 km/h. Además, entrega 400 Nm de par máximo entre 1.750 y 3.000 rpm, 20 Nm más que el de 177 CV.
A los que no puede superar en prestaciones es a los V6 de 3.0 litros. El de 245 CV pasa de 0 a 100 km/h en 6,5 segundos y alcanza los 225 km/h de velocidad punta, pero también es verdad que consume una media de 6,4 l/100 km. El de 258 CV pasa de 0 a 100 km/h en 6,2 segundos y alcanza los 230 km/h, con un consumo medio de 6,3 l/100 km. Y por último, el Audi SQ5 se mantiene como el más potente de la gama con sus 313 CV, que le permiten acelerar de 0 a 100 km/h 5,1 segundos y alcanzar los 250 km/h de velocidad máxima. El consumo medio, eso sí, es el más elevado: 6,8 l/100 km.
Precios
Hay que decir que también están a la venta las versiones Ambiente plus y Ambition plus con dicho motor a un precio de partida de 46.580 euros.