En España se venden más bicicletas que coches


No solo en Italia se venden más bicicletas que coches desde hace algo más de un año. En España y Grecia, otros dos países de la Unión Europea que las están pasando canutas económicamente hablando, también se ha producido un cambio de tendencia significativo.

A casi todos nos gusta ir en coche a todas partes, pero la crisis nos ha obligado a cambiar para sobrevivir. No nos engañemos, mantener un coche cuesta mucho, y no lo digo solo por los precios desorbitados del combustible, que también. Me refiero al impuesto de circulación, a las revisiones periódicas, a las averías que pueden surgir, a la zona azul, a los parkings…

Ahorro económico y menores emisiones

Las Jornadas de la Movilidad Sostenible son cada vez más populares porque la gente reivindica el uso de la bicicleta como medio de transporte. Lo hacen por el ahorro que he mencionado anteriormente, pero también por el gran favor que le hacemos al planeta. Las emisiones de dióxido de carbono desaparecen y el mundo se convierte en un lugar más limpio, menos contaminado.

Cambio de tendencia

Algunas marcas de coches están muy preocupadas por la influencia de los teléfonos inteligentes y las tabletas entre los más jóvenes. Los menores de 25 años identifican a estos gadgets como los nuevos iconos de libertad, por lo que ya no necesitan tener un coche para sentir que pueden hacer lo que les da la gana.

Esto último está avalado por algunos estudios que indican que los jóvenes de 18 años ya no están desesperados por sacarse el carné de conducir y comprarse un coche, aunque sea de segunda mano. Ahora tienen otras prioridades y eso es una amenaza para el sector de la automoción. De hecho, hasta los mayores de 50 años se están empezando a desinteresar por los coches.

Quien no tiene una bicicleta es porque no quiere

Comprarse una bicicleta conlleva un gasto mínimo, ya que por unos 100 euros puedes tener una. No hay que repostar, no hay que pagar impuestos y encima haces deporte. Puedes echar de menos el tener un coche en viajes largos, pero para eso ya están el autobús, el tren y el metro.

¿Reaccionarán las empresas del sector?

Con este panorama, creo que los fabricantes de coches se verán obligados a bajar precios. Eso y poner a raya a las petroleras para que no disparen el precio del barril de gasolina. Parece una misión imposible, pero no les queda otra si quieren sobrevivir en un mundo que está aprendiendo a vivir sin coches. La siempre se ha dicho que es inelástica, pero cuando cambian las mentalidades deja de serlo. Y luego ya no hay vuelta atrás.

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