Avisados estamos desde agosto que en el 2015 la filosofía del diseño exterior del C3 va a cambiar de las ruedas al techo. Se le presupone la incorporación de la nueva plataforma modular de PSA que hoy ya es el esqueleto de las Citroën Picasso y los Peugeot 308.
Antes de que llegue la tercera generación del popular ciudadano, Citroën pone en los concesionarios su tentativa de movilidad por autogás, o GLP, o Gas Licuado de Petroleo, como quieras llamarlo. La fórmula de sobras conocida consiste en dotar al coche de dos tanques, uno para gasolina y otro para el GLP. Si la cosa funciona en Citroën, es posible que también lo veamos en su homólogo del león, en el Peugeot 208. Y que en el 2015 siga a la venta cuando llegue el momento del relevo.
Para nosotros, el mejor C3 actualmente es el gasolina VTi 82 CV con la novísima caja de cambios pilotada ETG y con sistema Start&Stop. Al estar presente únicamente en el acabado Collection, sale por 15.050€. La versión con GLP cuesta 16.000€.
Son casi mil euros más. Nuestra tarea aquí es dirimir si vale la pena pagarlos.
Motores
En la oferta de sabores del C3 o del mismo C4, ya sólo quedan motores modernos, los EB Turbo PureTech que cumplen con la Euro 6.1 que entra en vigor a mediado de año. De todas maneras, siguen siendo mutaciones de la tecnología que desarrollaron PSA y BMW conjuntamente. Es decir, son muy recomendables para una amplísima variedad de usuarios.
Tratándose del C3, a excepción del VTi 120 CV, el catálogo de gasolina actual es un solo tricilíndrico 1.2 con 68 y 82 CV.
El golpe de gracia en el recién llegado GLP es que la potencia sube hasta 95 CV recuperando el cuarto cilindro y el cubicaje de 1.4 litros.
Habiendo probado el VTi 120 CV en diferentes coches de Peugeot y Citroën, podemos dar fe de que no vale la pena optar por el más potente. La supuesta superioridad de rendimiento se desdibuja, mientras que el precio aún son otros mil euros más y consume demasiado.
Los diesel 70, 90 y 115 CV salen del mismo motor HDi. Al precio de los seguros, revisiones, inspecciones de ITV, averías, coste de carburante e impuestos de circulación en España, el gasóleo no compensará casi nunca en un coche urbano. Al menos hasta que no se extienda y se fabrique una mayor variedad de propulsores diesel Blue HDi que PSA se acaba de sacar de la chistera. Entonces hablaremos.
En los 16.000 euros del C3 GLP, va incluido el tramo más bajo del impuesto de matriculación, porque supera por unos misérrimos 7 g/CO2 por kilómetro la frontera establecida en 120 g/CO2. Pero tiene la ventaja de no emitir otras partículas incómodas como el plomo y el azufre cuando está en funcionamiento el tanque de GLP.
El precio de este carburante es casi la mitad que la gasolina o el diesel aunque se gaste antes. Y al llenar ambos tanques nos encontramos conque reducimos el consumo, el ruido y ampliamos la autonomía en comparación con cualquier vehículo de gasolina.
Contrapesando datos, mi valoración personal en lo que respecta a la mecánica es que ciertamente valen la pena esos mil euros si le das bastante kilometraje a tu utilitario. Tendrías que hacer unas decenas de miles de kilómetros más para amortizar un diesel.
Muy, pero que muy importante:
El ahorro viene de la menor carga de impuestos en el GLP. Si este combustible llegase a tener la implantación del diésel, el gobierno y las petroleras ya se encargarían de que desaparecieran todas las ventajas.
Equipamiento
La terminación única en la que está disponible es la Seduction, justo un paso por detrás de la suntuosa y opulenta Exclusive.
Por lo tanto, los kits y complementos que lleva de serie son un efectivo gancho comercial:
– Aire Acondicionado.
– ABS con asistencia a frenada de emergencia.
– Radio CD MP3 con controles en el volante.
– Airbag de cortina delante y detrás.
– Regulador y limitados de velocidad.
– Luces diurnas LED.
– Bluetooth, USB y entrada auxiliar para dispositivos reproductores tipo iPod.
– Faros antiniebla
– Kit antipinchazos (porque el espacio de la rueda de repuesto está ocupado por el tanque de 30 litros de capacidad para el GLP.)
Nuevamente, en términos de equipamiento, mi valoración personal es que tiene argumentos sólidos para justificar los 1.000€ más.
Pero no incluye ESP de serie. Una laguna en la dote que a día de hoy cuesta mucho de perdonar. Si lo queremos añadir, hay que desembolsar 322,17€ aparte.
Al ritmo que las marcas están introduciendo mecánicas GLP y las estaciones de servicio están adoptando este carburante, es difícil pensar en una explosión eufórica como la que se vivió con el diésel, pero puede crearse un mercado importante entre conductores particulares y no sólo entre los taxistas.