Bastante mal parados salieron el Renault Clio RS 200 y el Toyota GT86 que protagonizan el siguiente vídeo. Las condiciones climatológicas no acompañan de la misma forma que en verano y eso se nota en circuitos como el de Nürburgring, donde ya están acostumbrados a ver accidentes de este tipo.
Susto sin consecuencias negativas para los pilotos
No hubo que lamentar víctimas, pero sí destrozos considerables en el chasis de los dos deportivos implicados. El utilitario de la firma francesa da la sensación de que golpea por detrás al GT86, algo que le hace perder tracción y termina con ambos estampándose contra las protecciones del «Infierno Verde«.
Como podréis comprobar al final del vídeo, el Clio RS 200 acaba con el frontal muy dañado. El neumático delantero derecho está triturado y fuera de lugar por culpa del último impacto, que a mí particularmente me recuerda a los autos de choque por cómo sale rebotado hacia la pista.