Dejando a un lado que una moto no es tan segura como un coche, hay que decir que ofrece un sinfín de ventajas por las que merece la pena comprarse una. Eso sí, también hay alguna que otra desventaja que nunca está de más conocer para no llevarse un chasco a posteriori. ¿Te apetece conocer los pros y los contras de conducir una moto?
Ventajas
Precio: Es la primera variable que hace que comprarse una moto sea muy apetecible. En plena crisis económica es posible encontrar motos a un precio medio de 6.000 euros, aunque evidentemente también las hay por 2.000 euros. Además, una de segunda mano te puede salir por unos 1.000 euros e incluso menos.
Consumo: El consumo de gasolina de una moto no tiene nada que ver con el de un coche, aunque últimamente las diferencias se han recortado. Puedes llegar a recorrer unos 500 kilómetros con 15 euros, ya que hay motos que solo consumen dos litros por cada 100 kilómetros recorridos.
Revisiones periódicas: Suelen ser bastante más económicas en comparación con los coches. Por unos 150 euros puedes pasar tu revisión anual.
Precio del seguro: Por unos 300 euros al año puede ser tuyo. También es más económico que el de un coche, puesto que el valor del producto asegurado es menor.
Aparcamiento: No hay problemas de aparcamiento. Puedes aparcar en cualquier parte evitando dar vueltas y pagar tanto zona azul como parkings.
Adiós atascos: Normalmente con la moto puedes evitar cualquier atasco. Esto es especialmente ventajoso a la hora de ir a trabajar. Las autopistas se convierten en un infierno, pero para las motos todo es mucho más llevadero.
Desventajas
Básicamente estaríamos hablando de pasar frío y no viajar tan cómodo como en un coche (llevar un casco no es cómodo, sobre todo en verano). También hay que tener en cuenta que solo puedes llevar a una persona contigo de paquete. Además, es evidente que hay más riesgo de morir en un accidente de moto que en uno de coche, puesto que el impacto no lo recibe el chasis, sino que es uno mismo el que sale despedido.