Tengo que reconocer que me ha hecho mucha gracia. Audi ha querido dar una lección a los estadounidenses a través de un anuncio de un minuto de duración en el que se critica, de forma encubierta por el buen rollo que transmite, la obsesión que tienen por la gasolina.
En el mismo aparece una mujer con un Audi A8 que se dispone a repostar diésel en una gasolinera norteamericana. Nada más descolgar la manguera se paraliza el mundo y los allí presentes empiezan a alucinar con su elección pensando que se ha equivocado.
La elección más eficiente
Es por eso que un cliente de la gasolinera se lleva las manos a la cabeza, a un transportista se le cae un paquete de las manos, un perro ladra como loco, la policía intenta por todos los medios que no reposte… Pero nada, no hay manera. Reposta con toda la seguridad del mundo y se marcha tan contenta.
En Estados Unidos el motor diésel 3.0 TDI es toda una novedad. Consume solo 5,9 l/100 km, así que debería seducir a más de un cliente yankee. De lo que no podrán disfrutar por esos lares es de los faros Matrix LED, ya que allí son ilegales (si os fijáis el diseño de los faros es distinto). ¿El motivo? Las autoridades dicen que pueden deslumbrar a los conductores que circulan en sentido contrario, algo que Audi no se cansa de negar rotundamente una y otra vez.
Actualización: El vídeo de YouTube ha pasado a ser privado. Lamentamos las molestias.