No es como para tirarse de los pelos, pero el que quiera un GTD ligeramente más extremado con estampa Fast & Furious, ya puede ponerse en contacto con los distribuidores de ABT. Los alemanes a día de hoy prácticamente se dedican de forma exclusiva a los coches de VAG, perfectamente podrían ser un preparador oficial del grupo. Siempre hay dos variantes: una muy radical para circuito y otra más pintona. La del Golf GTD es del segundo tipo.
Sube de 184 a 210 CV sin mejorar prácticamente nada en sus prestaciones (de 380 Nm de par máximo a 430), salvo que es más bajo, más endurecido de suspensiones y un par de llantas opcionales de 18 o 19 pulgadas. Como he dicho antes, no es como para tirarse de los pelos. La subida de potencia y las leves mejoras en aceleración o recuperación son producto de una sencilla reprogramación de la centralita, sin ningún otro cambio mecánico. Y la diferencia está sólo en unas décimas de segundo.
En ABT no es que lleven cuatro días haciendo coches de carreras. Su fundador, Johan Abt, abrió su primer taller en Kempten en 1896. Siempre han estado involucrados en carreras de coches en diversas disciplinas de circuito, incluida la DTM, pero han entendido que es mucho más lucrativo hacer tunings de Audi, Seat, Skoda y VW. Con eso han hecho su imperio.
Carrocería y precios
Para el Golf GTD, que lleva a la venta en España muy poco tiempo, la filosofía es meramente comercial. Unas pestañas para afilar las ópticas y un labio inferior frontal más pronunciado le cambian un poco la cara. Los faldones laterales le dan porte de coche más ensanchado, y un difusor trasero puramente estético con cuatro salidas de escape en lugar de las dos originales completan el pack. Por dentro, como gentileza te ponen unas alfombrillas nuevas con el logo de ABT
Como es habitual en la casa, la preparación no tiene porqué ser completa. Puedes pedir sólo el aumento de potencia, o sólo los cambios de suspensiones y llantas, o quedarte únicamente con el kit exterior. El precio, cuando incluyes las horas de montaje y dependiendo de tu configuración, puede ir de los 1.800 € a los 6.000 €.
Los Golf son coches sobrios, por más que los pintes seguirán siéndolo. Si de lo que se trata es de cambiarle un poquito el look, hay otros preparadores más accesibles, qué queréis que os diga…