Desde su fundación, Volvo siempre se ha caracterizado por ser una empresa del sector de la automoción que ha apostado fuerte por la seguridad. Eso es algo que les enorgullece, pero en los próximos años no quieren brillar solo por eso, sino que están dispuestos a ser líderes en eficiencia.
Para ello se han fijado en sus motores diésel, que siguen siendo los más demandados. La nueva gama, bautizada como i-ART por la tecnología que utilizará, mejorará los datos de consumos y emisiones considerablemente. Gracias a un nuevo sistema de inyección, capaz de funcionar a 2.500 bares, se ejercerá más presión en el common-rail. Eso, sumado a que será posible medir la respuesta de presión en cada inyector por separado, hará que sean más eficaces que nunca.
El nuevo sistema de inyección se dejará ver por primera vez en los motores VEA (Volvo Engine Architecture), cuyo lanzamiento está previsto para este otoño en formato de cuatro cilindros. Las nuevas cajas de cambio automáticas de 8 velocidades se encargarán de hacer el resto para comprimir las cifras al máximo.
Para terminar, podéis ver un par de gráficos comparativos que sirven para darse cuenta de cómo funciona la tecnología i-ART. Sin ella la combustión es más irregular, mientras que con ella es más estable al ser capaz de actuar con rapidez para adaptarse a los parámetros en función de las fluctuaciones de presión derivadas de haber dejado caer las primeras gotas. En resumidas cuentas, es capaz de hacer que la presión dentro de la cámara de combustión se adapte a nuestras necesidades.