Volkswagen no lo está pasando tan mal como otras marcas que no saben dónde meterse por culpa de la crisis. Continúa creciendo y se está haciendo fuerte en mercados tan potentes como el chino. Además, en Estados Unidos ha experimentado un incremento de la ventas de un 3,1% en marzo, y ya van 31 meses consecutivos creciendo por esos lares.
Tal vez por ello, el presidente del comité de empresa de la compañía, Bernd Osterloh, ha asegurado que su plantilla crecerá un 20% hasta 2018 para alcanzar la bonita cifra de 600.000 trabajadores. Qué buena noticia, ¿no?
Pues no, no lo es tanto como parece. La mayoría de incorporaciones se producirán en Asia, donde Volkswagen empieza a fabricar coches a destajo aprovechando que la mano de obra es más barata. En Europa apenas habrá contrataciones, algo que le propio Osterloh se ha encargado de dejar claro para no crear falsas expectativas. Todo un detalle por su parte.