A SsangYong le cuesta mucho ampliar su gama de modelos. No tiene ni el capital ni las instalaciones de otras marcas como por ejemplo Volkswagen, Toyota o Ford. Sin embargo, ideas no les faltan y nos lo demuestran cada vez que pueden en los diferentes salones del automóvil que se van celebrando por todo el mundo.
Modelos como el SsangYong XIV-2, presentado en el Salón de Ginebra 2012, nos demuestran que son capaces de innovar lo que haga falta, aunque luego los prototipos no avanzan como es debido y les cuesta mucho llegar a las cadenas de montaje. Lo mismo podría pasar con el SsangYong LIV-1, el último en sumarse a su larga lista de promesas.
Destinado al segmento premium
Se trata de un todoterreno robusto al que no le importa mostrarse al mundo como un mastodonte. Sus inflamados pasos de rueda y su elevada cintura intimidan a cualquiera que pretenda subirse a él. Sus siglas, Limitless Interface Vehicle («vehículo de interfaz ilimitada» traducido al castellano), dejan claro que no le asusta nada.
Las luces son LED y no hay que buscar los tiradores de las puertas traseras, más que nada porque prescinde de ellos. Por su disposición (2+2+3) es ideal para grandes familias que quieren disfrutar de un techo panorámico enorme para que ningún miembro se queje.
De momento nada más. Tendremos que esperar al Salón del Automóvil de Seúl, que por cierto arranca mañana, para conocer más detalles del que podría convertirse en el sustituto del SsangYong Rexton W.
