Traffic Jam Assist, conducción automática en los atascos para el 2014


Llegará el año que viene. Así de claro lo tiene el fabricante alemán Bosch. Hay diversas marcas que ya pujan por ello; Audi, Volvo, Ford… Bosch no ha dicho quién será el primero, pero lo lógico que es que el invento lo monopolicen en una primera fase las marcas más caras. Yo apuesto por Volvo, que son los que históricamente más se han metido en innovar sobre los sistemas de seguridad activos.

El Traffic Jam Assist es una evolución natural de los controles de velocidad adaptativos que ya son moneda corriente a día de hoy. Y aunque se lance en 2014, Bosch sabe muy bien que todavía habrá terreno por recorrer en esta tecnología.


En principio nacerá como una forma de conducción semiautónoma con dos clarísimas ventajas: reducción de estrés y mejor gestión del combustible. El coche podrá valerse por sí mismo en situaciones de circulación que oscilen entre el parado absoluto y los cincuenta kilómetros por hora. Pensemos en los miles de personas que pasan por estos atascos diariamente. Realmente parece un alivio notable para ellos.

Igual que un sónar

El sistema usa cámaras estereoscópicas (3D), dos radares (delantero y trasero) y sensores de ultrasonidos e infrarrojos. El concepto es similar a un sónar en un submarino; un control total de lo que hay en los 360º que rodean al vehículo y en una distancia de hasta 250 metros. A esto le sumas una gestión computerizada de la dirección electro-mecánica del coche para que efectúe por sí mismo correcciones de volante, y reduces drásticamente la posibilidad de alcances y colisiones en colapsos circulatorios.

Hoy ya se comercializan por separado todas estas funciones. Ford tiene un sistema de frenado automático ante coches que circulan lento, Volkswagen tiene el Lane Assist que mueve el volante para mantenerte en el centro del carril y casi todas las marcas disponen de gestores automáticos de aceleración que se adaptan al tráfico. Sólo era cuestión de ponerlo todo junto en un mismo ordenador.

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