La palabra «crisis» no se escucha por las oficinas de Porsche, o si se escucha es porque se está hablando de la competencia. La firma alemana está viviendo su época dorada y no hace otra cosa que incrementar su cifra de negocio año tras año. En 2011 ya os dije que sus ventas estaban experimentando un crecimiento considerable gracias a modelos como el Porsche Cayenne o el Porsche Panamera. Las mismas palabras tuve que emplear en mayo de este mismo año cuando se supo que habían cerrado 2011 con un crecimiento del 36,8% y el primer trimestre de 2012 con otro del 32,4%.
Otro año para tirar cohetes
A comienzos de diciembre ya lograron superar la cifra de coches vendidos en 2011. El día 12 había entregado 128.978 unidades, una cifra que supera en más de 10.000 las 118.868 de todo el año pasado. Además, en noviembre han crecido una barbaridad: 38,7%.
Evidentemente, ese éxito que han tenido durante el mes pasado no se debe a la gran demanda que hay en Europa. Los mercados que le han permitido incrementar sus ingresos han sido el estadounidense y el chino. En territorio yankee han vendido un 71,4% más que en noviembre de 2011, mientras que en el gigante asiático el incremento ha sido del 63,4%.