Con las primeras unidades saliendo por la puerta de Almussafes, Ford apuesta todas las cartas a la segunda generación del celebérrimo SUV. El listón sube un peldaño más, igual que han hecho con el Focus o con el Fiesta y, como se verá en breve tiempo, con el siguiente Ford Mondeo. Más eficiencia, más seguridad y, a mayor abundamiento, la tecnología más puntera. Todo por la causa del “One Ford”, modelos exportables a cualquier mercado, que encajen con todos los gustos y demandas, y que en cierta medida democraticen un poco dispositivos sólo acunados dentro de la despreciable palabra “premium”.
No creo que ni en sus mejores previsiones, Ford se experara la aceptación del Kuga en Europa, así que quieren seguir en la cima de la cadena trófica de los SUV, donde no tengan apenas depredadores que les amenacen. Para mantenerse ahí, lo primero que han rediseñado es la tracción total inteligente, All-Wheel Drive System, que ahora incluye un sistema electrónico para compensación de motricidades en las curvas. Tiene el original nombre de “Curve Control.”
Primeras motorizaciones
En el corazón, un único propulsor diesel 2.0 TDCi con dos escalones de potencia, 140 y 163 CV. Nada que destacar ahí, pues aunque haya sido profundamente revisado y mejorado, sigue siendo el mismo bloque motor Duratorq que conocemos de hace años en Ford.
En cuanto a la gasolina, ahora mismo también hay un sólo motor, el 1.6 EcoBoost, con las mismas potencias que encontramos en el Focus. Auto Start-Stop y 150 o 180 CV, según el capital del que dispongas. Pero igual que el próximo Mondeo, el Kuga incorporará los nuevos tricilíndricos turboalimentados más adelante. Ambos modelos, Mondeo y Kuga, serán los primeros en su especie que se muevan con un propulsor tan pequeño y eficiente, que no hace más que recoger premios allí donde va.
Interiores y puntos flacos
El Kuga ha crecido lo suyo, porque la mayor crítica que se le hacía es que no tenía suficiente espacio interior y, sobre todo, que le faltaba maletero. Así pues, ahora mejoran todas las cotas, y para trasladar bultos hay 46 litros más que antes. Además, el maletero se abre pasando el pie por debajo del parachoques trasero, sin necesidad de usar las manos.
Dentro, nuevos materiales de tactos más agradecidos y que aíslan mejor de los ruidos externos o del motor. Superior ergonomía en los asientos y un techo panorámico que debe ser una delicia, a juzgar por las fotos.
Y ahora el talón de Aquiles: las cajas de cambios. En gasolina y en diesel pueden ser manuales de 6 velocidades o automáticas por convertidor de par, demasiado desfasada. La mejor caja de cambios que tiene Ford, la Powershift de doble embrague, sólo está disponible con el motor diesel, la tracción integral y con el acabado Titanium.
Los precios de lanzamiento quedan dispuestos de la siguiente manera:
Acabado Trend
– 1.6 EcoBoost Auto-Start-Stop 150 CV / Man. 6v. / 4×2 — 19.995 €
- 2.0 TDCi 140 CV / Man. 6v. / 4×2 — 27.150 € (21.992 € con la promoción de lanzamiento)
- 2.0 TDCi 140 CV / Aut. 6v. / 4×4 — 29.150 € (24.992 € con la promoción de lanzamiento)
Acabado Titanium
- 1.6 EcoBoost Auto-Start-Stop 150 CV / Man. 6v. / 4×2 — 26.900 € (21.742 € con la promoción de lanzamiento)
- 1.6 EcoBoost Auto-Start-Stop 180 CV / Aut. 6v. / 4×4 — 31.400 € (27.192,00 € con la promoción de lanzamiento)
– 2.0 TDCi 140 CV / Man. 6v. / 4×2 — 28.900 € (23.742 € con la promoción de lanzamiento)
- 2.0 TDCi 140 CV / Aut. 6v. / 4×4 — 30.900 € (26.742 € con la promoción de lanzamiento)
- 2.0 TDCi 140 CV / Powershift / 4×4 — 32.400 € (28.192 € con la promoción de lanzamiento)
– 2.0 TDCi 163 CV / Powershift / 4×4 — 33.400 € (29.192 € con la promoción de lanzamiento)
Lo de la promoción de lanzamiento no está bien explicado, pero me imagino que tiene su truco y que incluye el plan PIVE de por medio, porque hablamos de ahorros entorno a los 4.000 euros.