En el mismo día que María Seguí nos felicita a todos desde la DGT porque ha sido el verano con menos muertos en la carretera (en total 262, que a mí me siguen pareciendo una barbaridad), en ese mismo día en que parece que los conductores vamos cobrando conciencia y prudencia, nos llega la resolución de un juez de Terrassa (Barcelona), que ha enviado a una buena perla a la cárcel. La conductora es una tal Laura H.B. y sólo tiene 21 años ¿Qué es lo que hizo? Conducir en contradirección en la autopista ciega de cocaína, triplicando la tasa de alcohol permitida y matando a un motorista que tuvo la fatalidad de cruzársela.
La información llega de la agencia EFE a quien fuentes judiciales les han facilitado los detalles de esta historia. Todo pasó la madrugada del sábado pasado, alrededor de las 2:30. Esta vecina de Sabadell (Barcelona) circulaba con las luces apagadas y una patrulla de la policía local le pidió a la joven que detuviera el coche. Ella, sin embargo, emprendió una huída demencial hasta entrar en la autopista C-58 en contradirección. A pesar de los intentos por detenerla, la chica siguió su fuga hasta que arrolló frontalmente la moto de Xavier G.S, de 54 años y también vecino de Sabadell. El hombre murió en el acto y el coche se incendió parcialmente, ocasionándole heridas leves a la conductora.
Laura H.B. no tiene antecedentes penales, pero esta vez la ha liado muy gorda. Se le ha ordenado prisión provisional sin fianza y está acusada de delitos de homicidio imprudente, conducción temeraria y bajo los efectos de sustancias psicotrópicas y alcohol.
No hace ni dos semanas que hablábamos de conductores así y de lo poco que importa que tú circules con toda la precaución y respeto del mundo. Si tienes la mala suerte de cruzarte en el camino de un chalado o una chalada, estás perdido. Como le ha pasado a este señor que iba tranquilamente en su moto. Y, digo yo, si tienes dinero para pagarte tu cocacína y unas cuantas copas de alcohol, también puedes apartar un poco para tomar un taxi y dejar el coche en casa.