Todavía estoy secando el teclado con el que escribo estas líneas. Las babas se han caído encima de las teclas inevitablemente tras ver las imágenes oficiales que ha publicado Aston Martin en las que aparece su flamante V12 Vantage Roadster. El descapotable británico ya se ha mostrado al mundo entero luciéndose en plena calle y dejando muy claro que será muy difícil competir con él en lo que a diseño se refiere, o por lo menos eso es lo que me parece a mí.
Ya tenemos todos los datos que tienen que ver con él, incluso conocemos su precio oficial. Costará 150.000 libras, lo que al tipo de cambio actual equivale a unos 190.000 euros. Bastante previsible era que costara unos 200.000 euros, así que en ese sentido poca sorpresa.
Donde sí hay sorpresas es en su magnífico motor V12 atmosférico de 6 cilindros que es capaz de entregar 517 CV a 6.500 rpm y 570 Nm a 5.750 vueltas. Todo ello acompañado por una caja de cambios manual de 6 velocidades, hacen que pueda pasar de 0 a 100 km/h en 4,5 segundos para alcanzar una velocidad punta de 306 km/h.
Cambios para conducir con la melena al viento
Como era de prever, los cambios respecto a la versión coupé no son muchos, aunque sí se advierten cambios en el diseño de las entradas de aire, en el capó y en el chasis para reforzar la estructura. También hay otros cambios más mecánicos como los que afectan a la suspensión.
El V12 Vantage Roadster mide 4,38 metros de largo y tiene una altura de 1,26 metros. En toda esa dimensión encontramos fibra de carbono en varias partes, como por ejemplo la carcasa de los retrovisores exteriores, el splitter delantero o el difusor trasero. Las llantas son de 19 pulgadas y montan unos neumáticos Pirelli P Zero Corsa en dimensiones 255/35 ZR19 y 295/30 ZR19, detrás y delante respectivamente.
Al igual que en la versión coupé, está disponible un botón Sport que permite optar por dos modos de conducción distintos. De serie viene enchufado el Normal, que según Aston Martin es ideal para el día a día porque ofrece una respuesta suave del acelerador y el sistema de escape emite menos ruido. Podríamos decir que el modo Sport es más para disfrutar en carretera, hacer el gamberrete o fardar. Válido para todo ello.
Interior atractivo y extras de lujo
En el interior se aprecian detalles de mucha calidad, como por ejemplo los botones de cristal que están incrustados en el salpicadero, los tiradores de las puertas de carbono o el volante de cuero. Climatizador automático, control de crucero, sensores de luz y lluvia, sistema de navegación con disco duro y conectividad Bluetooth son sólo algunos de los elementos que forman parte del equipamiento de serie.
¿No te conformas con lo que hay y quieres un poco más? Entonces lo que tienes que hacer es optar por los extras. Se puede adquirir un paquete de inserciones de fibra de carbono, varios sistemas de sonido Premium (Bang & Olufsen está por ahí…), placas personalizadas, sensores de aparcamiento delantero, cámara de marcha atrás, asientos calefactables, etc. Seguro que más de uno pensará que algunos de estos extras deberían ser de serie. Si es así estoy con vosotros.