El octavo Mini de la historia se ha subastado en una subasta de clásicos de Bonhams. El modelo en cuestión, sin restauración que valga, ha alcanzado el precio de 49.000 euros partiendo de un precio de 15.000 libras que fue subiendo como la espuma en cuestión de minutos.
Se cree que es el Mini más antiguo que no ha sido restaurado, algo que sin duda alguna ha servido para elevar exponencialmente su valor. La matrícula es XLL 27 y está para que lo tiren al container.
Su nuevo propietario tendrá que esforzarse mucho si quiere dar una vuelta con él. El motor no funciona desde hace muchos años y no hay más que chatarra oxidada. Normal si tenemos en cuenta que se fabricó en 1959.
Estamos hablando de un Austin Se7en De Luxe que sirvió para dar paso a millones de unidades que a día de hoy circulan por las carreteras de todo el mundo. Ha recorrido menos de 50.000 kilómetros y solo ha pasado una revisión, así que la garantía se ha perdido por el camino.