En España se calcula que entre un millón y un millón y medio de vehículos circulan sin haber pasado la famosa Inspección Técnica de Vehículos, más conocida por sus siglas ITV. Sea por el motivo que sea (tengo clarísimo que la crisis es el principal motivo), la situación es caótica y cada vez son más los propietarios de coches con más de cuatro años de antigüedad que no deciden pasarla.
Los particulares son los que más se escaquean de la ITV, mientras que los profesionales prefieren no jugársela y llevan un control mucho más riguroso de sus obligaciones, ya sea para evitar multas o para no tener sustos en la carretera.
La Guardia Civil (o la Policía Nacional, según el caso) para a poca gente para solicitar el justificante de la ITV. Este hecho ha provocado que muchos conductores se arriesguen a sabiendas de que son escasas las posibilidades de ser cazados.
La ITV es algo que hay que tomarse muy en serio. Podemos discutir si su precio es más o menos acertado, pero lo que no se puede negar es que constituye un peligro para todos (no solo para el conductor del vehículo que no ha pasado la ITV) que circulen vehículos que no están en condiciones de hacerlo. Frenos, amortiguadores y neumáticos son elementos de seguridad activa que no hay que pasar por alto. Son indispensables para garantizar la adherencia, la estabilidad y el comportamiento.
No te equivoques, el problema no es el precio, el problema es la falta de cultura automovilísitica de este país. Si los conductores fueran responsables y se preocuparan por el buen estado de conservación de sus vehículos no haría falta…
Y por cierto, un vehículo sin ITV en vigor que tenga un accidente la compañía de seguros no se hace cargo de nada (lo sé por experiencia propia, hace unos años un conductor chocó contra uno de mis coches aparcado en la calle y como el causante hacía seis meses que tenía la ITV caducada su seguro se negó a aceptar el siniestro).
This is Spañistán. África, en muchos sentidos pero en temas de seguridad vial y circulación más todavía, empieza en los Pirineos.
Estoy de acuerdo contigo Miguel, no cabe duda de que tanto una cosa como la otra son determinantes a la hora de que sea así en nuestro país, el de la pandereta.
Saludos!