Volkswagen acaba de presentar la nueva versión deportiva GTI del Polo, que se fabrica en la planta navarra de Landaben, un coche que monta un propulsor de gasolina de 180 caballos de potencia. El fabricante alemán ha asegurado que la versión GTI ofrece unas características de conducción superiores a la del modelo convencional con una gran agilidad y un nivel máximo de seguridad. Sin olvidarse de unos consumos (5,9 litros por cada cien kilómetros) y unas emisiones (140 gramos de dióxido de carbono por cada kilómetro) bastante contenidas.
Este automóvil incorpora una motorización de gasolina TSI de 1.4 litros, asociado a una caja de cambios automática DSG de siete velocidades, que permite al coche alcanzar una velocidad máxima de 230 kilómetros por hora, con una aceleración de cero a cien kilómetros por hora en menos de 6 segundos.